La témpera, también conocida como gouache, es uno de los materiales más utilizados en la pintura, en las distintas edades de nuestra vida.
Sin duda, la témpera es uno de los materiales más usados en los primeros acercamientos con la pintura y para decoración, pero en niveles más avanzados, es una excelente herramienta de trabajo, ya que posee diversas características que la convierten en un abanico de posibilidades estéticas.
Para conocer cuáles son las diversas posibilidades que te ofrece esta técnica, te invitamos a 5 principales técnicas para pintar con témpera.
¿En qué consiste la pintura con témpera?
Como seguramente ya debes saber, la témpera es una pintura muy similar a la acuarela, pero algo más concentrada y opaca. Esto se debe a que posee blanco de cinc o talco, generando que se pueda trabajar por capas de color claro sobre otras oscuras.
Por lo tanto, se puede utilizar en empastes de colores, dibujos, trazos, entre otros.
Se aglutinan con goma arábiga o con algunos aglutinantes plásticos.
Esta se diluye en agua y en niveles más avanzados se aplica con pinceles, brochas, esponjas o algún otro artefacto que pueda succionar algo de pintura para ponerla sobre una superficie.
Suele obtener brillo con la acción del barniz al agua.
Generalmente la témpera resulta bastante ideal para pintar paisajes, bodegones, retratos, abstracciones.
Técnicas para pintar con témpera
1. Veladura
En esta técnica se realiza una primera capa de color que debemos dejar secar. Luego, se aplica una nueva capa de color con mayor dilución, la idea es que puedan verse ambos tonos, el de la capa inferior y el nuevo.
También es posible que para este tipo de técnica utilices solo una porción de la capa inferior para cubrirla con la nueva capa, por lo que dejas una poción sin pintar, por lo tanto, visible.
2. Superposición
Esta técnica es casi idéntica a la veladura, pero con la diferencia de que cada una de las capas tienen espesor, por lo que una tapa a la otra.
3. Salpicado
Es una técnica muy utilizada para lograr un efecto impresionista o trabajar puntillismo. Con un cepillo de dientes sumergido en pintura, realizamos una frotación con tu dedo pulgar o el que más te acomode, generando una salpicadura de pintura en la superficie a pintar.
4. Degradado
En esta técnica lo que haces es pintar la mitad de una superficie de un solo color y con una pintura espesa a la que luego vas añadiendo agua en pequeñas porciones para ir aclarando el tono. Esta técnica se realiza hasta completar la superficie que deseas pintar.
Algunos consejos para pintar con témpera
- Pinta varias capas para así evitar que la pintura se quiebre. También resulta muy efectivo utilizar imprimación como base.
- Utiliza pinceles, espátulas, cepillos, esponjas u otros materiales para generar diversas texturas.
- Recuerda que los colores al secarse quedan más claros, por lo que si vas a pintar colores preparados es conveniente generar una porción que alcance para cubrir la superficie que vas a usar con ese tono, ya que puede que existan diferencias en una nueva preparación.
- Es recomendable que apliques colores más oscuros al final al intentar oscurecer o aclarar un color. Es siempre más simple oscurecer, y así evitas perder pintura.
- Es conveniente al pintar por capas, ir desde una más diluida a la más espesa, de esta manera evitamos que las capas aguadas se fusionen y obtenemos superposición.
Recuerda que siempre la práctica ayuda a mejorar la técnica. Realiza diversas pruebas en diversas superficies,con distintos elementos y mezclas de pintura.
Lo importante es que puedas ir probando cada una de estas técnicas para utilizarlas según el tipo de obra que desees realizar.
En Artel tenemos los materiales necesarios para que puedas poner en práctica todo lo que vas aprendiendo sobre la pintura ya sea con témpera u otros pigmentos. Te invitamos a conocer las diversas herramientas que tenemos para ti.